jueves, 20 de octubre de 2016

Carpe Diem; Op V, Erasmus borrachas

A veces son murmullos de silencio que me mataban,
y a veces moría por tu palabra.

Y en la cama era horrible.
Era perfecto,
de tanto amarte,
pero nunca podía entrar.
Siempre era el umbral

Muy estrecho, en tu cueva privada, sólo podías pasar tú.
No había sitio para dos,
yo iba a estar siempre fuera.

Sólo eran metáforas.
(,pero)
Ya me lo decía tu coño.

Los secretos eran como agujas de voodoo.
Eran tonterías, que no podías compartir.
Eran tonterías, que quería tener.

Así que al final
ni siquiera hay un final.

Pero oye, que nos quiten los bailao.

Y como dijo el cani:
"Podrás borrarme del facebook, del móvil, y del whatsapp,
pero nunca podrás descomerme la polla."

No hay comentarios:

Publicar un comentario